miércoles, 10 de julio de 2013

Educación inmigrante en Chile



Introducción
Históricamente Chile y Perú han tenido diferencias que actualmente parecen ser irreconciliables, esto es debido al enfrentamiento que sostuvieron ambos países entre los años 1879 y 1883. Dichas diferencias se hacen presentes principalmente cuando ambas culturas interactúan, originando una relación de desconfianza entre ciudadanos de dichas naciones.

Debido a la globalización y a la situación política, social y económica que ha afectado a Perú y especialmente a la población trabajadora  de dicha nación durante la última década, ha provocado que miles de ciudadanos peruanos opten por radicarse en otros países, en busca de solucione a estos problemas. Provenientes de distintas partes de Perú y con el  objetivo de mejorar sus condiciones de vida  y en todo sus ámbitos. Es así que desde hace dos décadas y con el creciente aumento de la economía de Chile han ingresado a Chile, en calidad de turistas, ciudadanos peruanos, de los cuales viene la mayoría viene en búsqueda de mejores oportunidades de vida, estando una parte de ellos en forma ilegal en el país. Debido a lo antes mencionado y a la  importante cantidad de inmigrantes peruanos que permanecen en Chile, es que se han empezado a realizar distintos estudios y trabajos, con el objetivo de describir, distinguiendo e identificando la realidad socio-económica en que viven dichos residentes en nuestro país. 

 
Pero en los últimos años también se vienen ideando movimientos políticos-sociales-educativos  a favor de sus derechos y en el plano de la educación, se cuestiona dicha desigualdad que se presenta en los niños y niñas inmigrantes al no entregarles uno de sus derechos más básicos el de la educación. El presente artículo pretende analizar los alcances y desafíos del ejercicio de derechos de las niñas y niños peruanos inmigrantes en Chile desde su comprensión teórica como sujetos de derechos y actores sociales que participan -invisibilizadamente- en los procesos migratorios que inician, planifican y legislan las personas adultas, quedando de lado sus emisiones, amistades y el derecho de poder elegir.

Desarrollo
Durante los últimos años, se comienza a observar y estudiar la presencia de inmigrantes de origen peruano y con ello una gran cantidad de un flujo infantil, especialmente en las fases de reunificación familiar que emprenden, sobre todo, las mujeres que son madres e inician un proyecto migratorio familiar. Es así que las niñas y los niños, en general tienen una posición subordinada en la estructura generacional de la sociedad y de las familias, dado que normalmente las opiniones y decisiones sobre las cuestiones migratorias circulan entre las personas adultas, y ellos sólo deben “asumirlas”. Por tanto, la acción infantil se desarrolla dentro estos límites.

El sistema educativo chileno está basado en las reglas del mercado y en la desigualdad de resultados entre los centros escolares privados, con excelentes notas, y los públicos, con deficientes calificaciones. Los niños y niñas de origen peruano se han ido insertando  generalmente en colegios públicos y con condiciones muy precarias. En este escenario, la (in)capacidad para ejercer el derecho a la educación a veces es producto de la falta de ciertos “papeles”, o de los altos costos de los trámites de visado y las interminables y difíciles exigencias burocráticas que desalientan a las familias para llevar a cabo el ingreso escolar. Todos estos requisitos a veces generan un círculo vicioso, porque el colegio exige el visado infantil para iniciar la matrícula regular, y a su vez en el Consulado solicitan el Certificado de Matrícula de Alumna/o regular de la escuela para tramitar el visado. La presión de las organizaciones sociales y el Consulado peruano en Chile han logrado que el Gobierno elabore algunos Instructivos que regulen el acceso a la educación formal y al sistema sanitario. Pero en la práctica la alta demanda de matrícula inmigrante desborda estas buenas intenciones de los Instructivos, lo que se evidencia en la ausencia de políticas y programas de Acogida, por ejemplo. En ocasiones, el acceso a la educación de las niñas y niños extranjeros queda finalmente en las manos de la dirección de los colegios. Sin embargo, algunas familias -y según declaran algunos centros escolares- aún ignoran los mecanismos de acceso escolar; por lo tanto en la práctica, no se cumple cabalmente el derecho a la educación, que por cierto es obligatoria hasta los 18 años.

A consecuencia del ingreso a de los inmigrantes peruanos se ha generado la necesidad mutua entre los profesores chilenos que desde una  eventual cierre de una escuela y la necesidad de los niños de inmigrantes peruanos por una educación es que se ha podido abrir las puertas a la escolaridad para estos niños entregándoles la posibilidad su estudiar y seguir su proceso de aprendizaje  en una cultura y país distinto al suyo.

La residencia en determinadas comunas, hace que las niñas y niños acudan a determinados centros escolares, con lo cual se reproducen las lógicas de exclusión socioterritorial que se viven en otros ámbitos de la sociedad chilena, y que afectan igualmente a las comunidades inmigrantes. La “buena” voluntad de algunos centros por acoger niñas y niños extranjeros, facilita el acceso; pero desencadena paulatinamente un proceso de “sobreconcentración de población escolar inmigrante”. Conocida es las Escuelas República Alemania, por nombrar una de las más emblemáticas  dentro del mapa migratorio santiaguino, por la apertura y acogida a las niñas y niños inmigrantes, que a menudo son excluidos de otros centros


 Las niñas y los niños peruanos suelen presentar algunas dificultades para acomodarse a un nuevo sistema educativo, que no siempre está preparado para crear mecanismo de acogida de las niñas y niños de origen inmigrante, así como aprovechar la diversidad cultural que ellos aportan.

Sin embargo, las niñas y los niños peruanos también valoran otras oportunidades en la escolarización y la supuesta calidad y le atribuyen discursivamente un mejor nivel a la educación chilena. Esto se relaciona con las ideas que normalmente subyacen a los proyectos migratorios familiares: la posibilidad de ofrecer una “mejor educación” (ojala universitaria) para lograr la ansiada movilidad social en los países de destino. Los imaginarios que circulan en las comunidades hidratantes, muchas veces son irreales, o más bien matizados, por las oportunidades y situaciones escolares concretas que viven las niñas y niños inmigrantes.

También el colegio se valora con un espacio de socialización para las niñas y niños inmigrantes, quienes aprovechan en esta instancia de crear vínculos afectivos y amistades con sus pares, las relaciones con el profesorado suelen ser diversas, en ocasiones se observa un tradicional autoritarismo, mientras que en otras es altamente valorada la atención y el trabajo docente de acompañamiento en las primeras etapas de inserción y acomodación, la participación y el ejercicio de derechos de las niñas y los niños peruanos en los procesos migratorios en Chile están atravesados por las condiciones específicas tanto del contexto migratorio en general, referido a las leyes y políticas, así como a las dinámicas propias del entorno escolar, familiar y comunitario. Los antecedentes de la migración peruana en Chile hacen referencia a múltiples situaciones de desventaja y oportunidades que conforman un complejo entramado político, económico y social.


Por su parte, el Estado y la sociedad chilena mantienen cierta perplejidad ante esta situación. Los tímidos intentos por legislar el acceso a la salud y la educación nos muestran que no es suficiente, se necesita una política pública que atienda su rol de garante de derechos infantiles.

 No se puede negar que los Instructivos y Circulares son un avance, pero lo que urge es articular los esfuerzos sectorizados para diseñar una política migratoria con enfoque de derechos; con perspectiva de género y una mirada intercultural, no sólo en el plano laboral, escolar y sanitario, sino en toda la dimensión del fenómeno migratorio. Es preciso facilitar el ejercicio de todos los derechos a todas las niñas y niños inmigrantes, en especial los referidos a la participación en los asuntos que les afecten y a la reunificación familiar, puesto que se denota la ausencia de acciones estatales en estos ámbitos.

La inmigración en la sociedad chilena refleja y cuestiona las profundas desigualdades y vulneraciones que se viven y aún no están resueltas al interior de la misma. Los discursos y las prácticas de las niñas y niños peruanos muestran que la discriminación racista está muy arraigada en los valores tanto del profesorado, como entre estudiantes y en el barrio, incluso ellos mismos la reproducen. Es necesario investigar e intervenir profundamente estos temas y acompañar los procesos de la niñez inmigrante, con el objetivo de facilitar el ejercicio del derecho a la no discriminación desde la sociedad de acogida y por parte de ellos mismos en un diálogo crítico. Por último, el goce de todos los derechos y el reconocimiento como sujetos sociales también forman parte de las reales oportunidades de movilidad social que promete la migración para las niñas y niños peruanos en Chile.


Cuando se aborda el tema de la educación y el multiculturalismo, el principal problema consiste en saber cómo hacer con algunas de las tensiones que surgen inevitablemente al tratar de conciliar concepciones del mundo que compiten entre sí. Esas tensiones reflejan la diversidad de valores que coexisten en un mundo multicultural. A menudo no pueden resolverse simplemente gracias a una solución de tipo «lo uno o lo otro». Sin embargo, el intercambio dinámico entre aspectos rivales es lo que da riqueza al debate sobre educación y multiculturalismo.

Una tensión importante deriva de la naturaleza de la propia educación intercultural, que combina el universalismo con el pluralismo cultural. Este rasgo es particularmente evidente en la necesidad de destacar el carácter universal de los derechos humanos al tiempo que es preciso mantener la diferencia cultural, lo que puede poner en entredicho varios aspectos de esos derechos. Las nociones de diferencia y diversidad pueden también dar origen a tensiones entre la costumbre de ofrecer un programa de estudios a todos los niños de un país y la de proponer programas que reflejen distintas identidades culturales y lingüísticas o, dicho en otras palabras, tensiones entre el principio general de equidad y la tendencia de cualquier sistema de educación a la especificidad cultural. Para la educación intercultural el desafío consiste en establecer y mantener el equilibrio entre la conformidad con sus principios rectores generales y las exigencias de contextos culturales especioso.

La Escuela República de Alemania ha definido su Misión Educativa, como “Formar, sin discriminar, niños y niñas honestos, responsables y respetuosos, con capacidades para enfrentar desafíos futuros”. 

Por tanto, el Reglamento de Convivencia Interno de Convivencia Escolar recoge los valores expresados en la Misión, los Objetivos Transversales de la Educación de Chile,  su Proyecto Curricular y los traduce y operacionaliza en Derechos y Deberes de los alumnos y en  implicancias implícitas explicitas para funcionarios y apoderados.

La mayor presencia de niños/as peruanos/as en Chile, debido al proceso de reunificación o reagrupación familiar comentado anteriormente, ha generado una mayor demanda de servicios educativos en las escuelas. 

• Los hijos e hijas de personas inmigradas podrán incorporarse como alumnos regulares a la educación básica y media chilena, aun cuando sus padres no tengan su situación de residencia al día. La situación de residencia de los padres no puede ser causal para impedir el derecho a la educación de los hijos.

• Las autoridades educacionales y los establecimientos deberán otorgar todas las facilidades para que los alumnos y las alumnas inmigradas puedan ingresar, a la brevedad, al sistema escolar.

• Para estos efectos, será suficiente requisito que el postulante presente al establecimiento una autorización otorgada por el respectivo Departamento Provincial de Educación y un documento que acredite su identidad y edad.

  
Esta normativa está permitiendo el acceso a la escuela ha hijos e hijas de personas migradas, sin embargo, esto no necesariamente garantiza que los procesos educativos se realicen en un marco de respeto a su identidad, ni menos se promueva la integración efectiva a través de estrategias educativas interculturales. Por el contrario, el sistema educativo nacional se caracteriza por su profunda homogeneidad y su marcado etnocentrismo, que se traducen en una oferta curricular uniforme que niega la diversidad inherente a nuestra sociedad. 

El currículum, como mensaje transmitido por la escuela, tiene una fuerte apuesta por la selección y organización de la “cultura”, vale decir, “no es un procesoazaroso y neutro, sino que intencional, que compromete una visión de hombre y sociedad, por consiguiente está cargado ideológica y valóricamente.

Pues bien, esta mirada intencional del currículum implica que se desenvuelve sin atención a las condiciones culturales que definen el contexto concreto de los centros educativos, sino a través de discursos centralizados y uniformes que tienen finalmente un sentido etnocéntrico que “ha conducido a discriminaciones en el currículum, de suerte que la cultura de los indígenas, la mujer, los campesinos, los pobladores, los pobres y muchos otros grupos marginados no han tenido espacio en los saberes que se trasmiten. Existe, por así decirlo, una incapacidad de reconocer al otro.

Y ese es un ámbito dentro del cual se expresa la marginación de la vida cotidiana de la “diferencia”, anulándola o simplemente negándola en aquello que se constituye como mensaje “oficial” y “valido” a ser transmitido por la escuela. Se trata de entender que la mayor parte de los establecimientos niegan en sus prácticas cotidianas la diversidad manifiesta al interior de ellos. 

Sin embargo, cuando los centros educativos se transforman en un lugar de encuentro que hace visible la diferencia, las posibilidades para la integración mutua son mucho mayores y permiten albergar esperanzas en la construcción de relaciones mucho más solidarias entre diversos. Y esto es precisamente lo que se busca exponer en lo que sigue, a partir de la presentación de la forma en que una escuela en particular trabaja con sus estudiantes chilenos/as y peruanos/as.

La escuela también provisionando a estos niños un programa de Salud Escolar; Programa de Alimentación Escolar y Programa de Inglés Intensivo. Programas de talleres extraescolares como  de ates, ecoturismo, manualidades, deportes y reforzamiento para diversas asignaturas en el caso que algún niño necesite de una nivelación estudiantil.


Pese a todos los problemas y  dificultades que conlleva a la existencia de estos centros educativos, es importante destacar el esfuerzo que ha llevado a cabo el establecimiento  con el fin de incluir parte del conjunto de sus estudiantes de origen peruano y adaptar el currículum para una mejor expresión de sus referentes culturales. Y si bien estas actividades todavía se sitúan dentro de un nivel básico de integración cunicular, no es posible desconocer el aporte que realizan, en tanto señalan un camino de apertura y sobre todo de familiarización de los/as estudiantes con algunas de las características culturales que manifiestan este sector de procedencia peruana. Por ejemplo, el profesor de “Comprensión del Medio Social”, asignatura que incluye el tratamiento de temas históricos, ha hecho un esfuerzo por presentar contenidos y temas comunes desde ambas perspectivas (chilena y peruana). Sin embargo, al carecer de preparación, por ejemplo en historia del Perú, el impacto es limitado. Por eso es preciso contar con una voluntad clara por parte del ministerio para renovar el currículum y darle un carácter multinacional y multiétnico, invertir en la formación de recursos humanos y definir una política educativa más amplia.

Esta demanda es totalmente pertinente en el escenario actual del país: migración como fenómeno creciente; mayor integración y apertura de Chile hacia otras realidades; mayor visibilidad de grupos social e históricamente excluidos. En rigor, todo ello demanda una forma educativa distinta en que parte de los contenidos se puedan trabajar desde miradas diversas. Una medida que puede ser puesta en práctica en este tipo de escuelas, con presencia de personas migradas peruanas, podría ser construir un currículum binacional que al menos considerara parte de los contenidos históricos. La voluntad política es un requisito determinante en tal sentido.

Conclusión
Tomando en cuenta todo lo señalado anteriormente, podemos observar que la integración e intercambio cultural que se está provocando en esta escuela, representa la temática de una nueva integración e inclusión de otras culturas a la nuestra, enriqueciéndola cada día mas, es así como podemos ver en el día a día como han ido creciendo el comercio de los distintos países, en este caso con los restaurant de origen peruano, que hace algunos años atrás eran unos pocos al día de hoy estos ya se han masificado, teniendo una muy buena aceptación por partes de los comensales nacionales. Es así que podemos mencionar que esta nueva diversidad cultural que rodea a la escuela y a su entorno debería ser fuente para nuestro país de un gran progreso y enriquecimiento cultural, humano y social.



Podemos comentar que unos de los fines de este tipo de educación multicultural que se está presentando en esta escuela, es proporcionar a los niños y niñas inmigrantes las habilidades necesarias para que se puedan desarrollar y adaptar de una mayor y mejor manera a una cultura y sociedad distinta a la suya. Sin perder la suya.

Queremos señalar también las ventajas que vemos al integrar estas nuevas culturas a nuestra nació, que debemos tratar de aprovechar y potenciar a nivel educacional y social:
  • ·         Aportar una nueva cultura enriquecedora
  • ·         Acercar una cultura diferente a nuestro país
  • ·         Empatía
  • ·         Más abiertos de mente
  • ·         Respeto por la diversidad cultural
  • ·         Los alumnos se implican cada día más
  • ·         Conocer más visiones y puntos de vista
  • ·         Conocer otros modos de vida de otros lugares
  • ·         Preparación para una mejor sociedad
  • ·         Aprender a asumir nuestras propias diferencias
 Creemos que la multiculturalidad y la interculturalidad en los países es necesaria, ya que permite reconocer a distintos pueblos y sus orígenes, como parte de nuestra sociedad, incluyéndolo en nuestro sistema de vida.

También queremos mencionar los puntos más alto que se presentan en esta integración de estas distintas culturas, son las siguientes:

• Cantar el himno nacional de ambas naciones (Chile y Perú)

• Celebrar la independencia de ambas naciones con actividades que integran y permiten relacionarse tanto a apoderados como a los  niños

• Grupos folclóricos que promueven las culturas de los países en celebración

Queremos destacar un punto importante, es que esta nueva relación de estas dos culturas que se da en la educación principalmente en la escuela Republica de Alemania puede ser un punto de inflexión o la base en este puente cortado y así restablecer los lazos y tener una relación de hermandad no solo con Perú sino con el resto de nuestros países vecinos  y así dejar atrás la antigua rivalidad que nos separa como países hermanos. 


 Para finalizar queremos referirnos a la misión de este colegio “Formar, sin discriminar, niños y niñas honestos, responsables y respetuosos, con capacidades para enfrentar desafíos futuros”. Ya que nosotros como futuros docentes, debemos aspirar a realizar esto con nuestros alumnos por así ganamos todos la sociedad,  los alumnos  sus  familias, los docentes, ya que construimos una sociedad que aprecie la diversidad en su sentido más amplio.




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